KENTUCKY JUSTO CAMPEÓN

Pues si, por un año y sin que sirva de precedente, el equipo favorito para casi todo el mundo, antes de comenzar el torneo final de la NCAA, ha terminado alzándose con el titulo de una forma rotunda y casi insultante. Kentucky con todo merecimiento se ha aupado con el titulo de campeón nacional del baloncesto universitario 2012.
A principios de curso las dudas se amontonaban encima de este nuevo proyecto de Kentucky, no por la calidad de sus jugadores, ya que Terrence Jones, Doron Lamb y Darius Miller regresaban a Lexington tras coquetear con el draft de la NBA, y además la clase de reclutamiento era nuevamente estelar, con Kidd-Gilchrist y Anthony Davis a la cabeza, sino sobre todo por ver si Calipari era capaz de con tanto talento crear un equipo de baloncesto que fuera capaz de rendir al máximo nivel y ganar partidos, no como en años anteriores donde se habia quedado a mitad de camino.

Las dudas enseguida se difuminaron, ya que comenzaron la temporada con insultantes victorias ante rivales flojos y sobre todo con grandes victorias ante Kansas, North Carolina y Louisville, en los partidos mas complicados. Solo una derrota en cancha de Indiana, en el ultimo segundo tras una prorroga les alejo de conseguir una temporada perfecta.
En su conferencia el dominio fue abrumador otra vez, 16-0 de record le alzo con el titulo de la temporada regular y solo una mala noche ante Vanderbilt les privo del titulo de su torneo. Creo que si la derrota ante Indiana no se hubiera producido, esta en la final de la SEC seguramente tampoco, ya que jugadores y entrenador reconocen que ese partido no se lo habían tomado con la intensidad necesaria.
Ya en el torneo final pasaron rodas sin apuros. Derrotaron a Western Kentucky sin sobresaltos en segunda ronda, en un partido que en la primera parte rompieron y que en la segunda mitad se dedicaron a mantener la ventaja. En tercera ronda, un duro rival como Iowa State lucho hasta la saciedad por hacerles frente, pero los Wildcats tumbaron cualquier atisbo de remontada y se mantuvieron firmes hasta lograr su objetivo. En Sweet 16 nada menos que uno de los dos equipos que habían sido capaces de derrotarles durante el año, dura prueba ante Indiana. Los de Calipari entraron en el juego del intercambio de canastas propuesto por sus rivales, y machacaron a los Hossiers por 102-90, logrando una de las anotaciones mas altas de los últimos años para un partido de esta ronda. En la final regional esperaba otro duro equipo, como era Baylor y sus jugadores físicos, que tampoco pudieron soportar el ritmo de Kentucky y sucumbieron con claridad.

Ya en la Final Four, se enfrentaban a un rival completamente distinto a lo que se habían enfrentado antes, los Cardinals de Louisville de Pitino, y su asfixiante defensa. Aunque sufrieron mas de la cuenta, ya que no pudieron correr tanto como les gusta y no pudieron controlar los tableros, dieron una impresión de suficiencia y tranquilidad que daba que pensar que todo estaba controlado en todo momento. Así en los últimos 8 minutos volvieron a sacar una de sus tormentas ofensivas y ganaron el partido con solvencia.
La final ante Kansas fue mas de lo mismo, un buen arranque les permitio liderar el marcador con cómodas ventajas, distanciándose hasta por 18 puntos. Una vez los Wildcats se ponen por delante son un equipo muy rocoso, casi imposible de remontar, ya que Calipari ha sabido darle a estos Wildcats un sentido colectivo y aguerrido que sus otras promociones no han tenido.Por eso tras controlar los arreones finales de los Jayhawks, se coronaron con el titulo de campeones que tanto se habían ganado.

Seguramente no estamos ante el equipo con mejor plantilla de la NCAA, ni a lo mejor tampoco delante del que mejor baloncesto ha desplegado, pero creo que si son unos muy dignos campeones. Estos Wildcats no son solo un puñado de individualiadades, creo que este año Calipari a logrado algo mas. Ha conseguido que varios de los mejores freshman de la competición dejen a un lado sus egos y se dediquen a jugar como un colectivo, unidos por un fin común. Para nada se parece este equipo a el de hace dos años por poner un ejemplo, donde grandes jugadores como Wall o Cousins iban por libre buscando su lucimiento personal. Este año jugadorazos como Anthony Davis, Michael Kidd-Gilchrist o Marquis Teague han sabido tomar el rol que les correspondía para formar un equipo equilibrado en anotación, en oportunidades y sobre todo entregado en defensa, la base para un equipo campeón.
No soy precisamente un fan del one and done y toda la filosofía que Caliapari esta desarrollando a su alrededor, pero si que reconozco que este año ha hecho un gran trabajo como entrenador. Si seguimos abocados al efímero paso de las estrellas por la NCAA, durante solo un año (mejor así, que no como ocurría antes que pasaban directamente de High School a NBA), hay que reconocer que Calipari es el mejor sacando partido de ello, y creo que va a haber muchos entrenadores que van a tener que seguir su estela par poder competir. Empieza una nueva era de dominio....??, es pronto para saberlo pero esta victoria de Kentucky podría suponer un antes y un después en el devenir del baloncesto universitario.